En una de esas sesiones donde uno disfruta de una mañana fantastica en muy buena compañia, perdidos lejos del ruido y olvidado por varias horas de la rutina del día a día, pude conseguir gracias a un gran amigo y persona a este Capuchino al que ya le tenia ganas y al fina lo consegui.
Son nerviosos como sus hermanos el Herrerillo Común, estos últimos llamativos por sus colores y los Capuchinos por ese ojo rojo llamativo y su cresta, que cuando la consigues erizada es una maravilla.
Te pueden ofrecer posturas para dar y tomar.
preciosas, ya me contó Miguel lo bien que lo pasásteis.
ResponderEliminarsaludos
Javi
Stunning post
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